Tutorial completo: Configuración del Sculpfun S30 Pro Max con Lightburn paso a paso

Descubre cómo configurar tu Sculpfun S30 Pro Max con Lightburn de manera  fácil efectiva! En este tutorial paso paso, te guiaré través del proceso  completo de configuración, desde la conexión inicial hasta la realización de  pruebas de potencia velocidad. Aprenderás optimizar tu máquina para  obtener cortes precisos grabados de alta calidad en diversos materiales. Ya  seas principiante usuario experimentado, este video te proporcionará los  conocimientos necesarios para sacar el máximo provecho de tu cortadora láser.

Instalación de Lightburn

Si acabas de adquirir un Sculpfun S30 Pro Max, el primer paso es aprender algunos aspectos básicos sobre el equipo y el software para sacarle el máximo provecho y disfrutar de las excelentes características que ofrece. Para ello, utilizaremos el programa LightBurn, un software muy completo. Tras probar varios programas, puedo decir que este me parece el más completo y fácil de usar. En su página oficial puedes descargar una versión de prueba de 30 días, y posteriormente solicitar una extensión de este periodo para seguir utilizando el programa.

Una vez que hayas descargado LightBurn, te recomiendo consultar la documentación oficial en su sitio web para familiarizarte con la interfaz de usuario y las diferentes opciones del programa. Aquí veremos cómo configurar tu Sculpfun en LightBurn y qué parámetros debes modificar en la configuración, dependiendo del tipo de trabajo que desees realizar, ya sea grabado o corte, y según el material que utilices.

Una vez que tengas tu Sculpfun armado (para ello te sugiero seguir las instrucciones del fabricante, verás que es muy sencillo), lo primero que debes hacer es descargar el programa LightBurn. Después de la descarga, la instalación es muy sencilla: básicamente, debes aceptar las opciones por defecto y hacer clic en "siguiente". Cada vez que abras el programa, aparecerá una ventana que te informará de los días restantes del periodo de prueba.

Configuración del equipo Sculpfun

Cuando ejecutamos el programa por primera vez, aparecerá un asistente de instalación de dispositivos. Para instalar correctamente nuestra máquina láser, seguiremos los siguientes pasos:

En la primera ventana, debemos hacer clic en "Find My Laser".
El programa nos pedirá que conectemos la máquina de grabado láser a la computadora mediante el cable USB y que encendamos la máquina.
En este punto, el programa escaneará los dispositivos USB conectados y nos mostrará aquellos que ha detectado. Debemos verificar que el dispositivo que aparece sea el que deseamos agregar. Una forma de hacerlo es mediante las medidas del área de trabajo del láser (en mi caso, aparece un dispositivo GRBL con un área de trabajo de 410 x 400 mm, que corresponde a mi máquina). Seleccionamos el dispositivo en la ventana y hacemos clic en "Siguiente".
A continuación, debemos asignar un nombre al dispositivo que estamos agregando y verificar nuevamente las medidas del área de trabajo.
Por último, seleccionamos el punto de origen o "home" de la máquina. Aunque podemos elegir cualquiera de las 4 esquinas, es más común seleccionar la esquina frontal izquierda, es decir, el punto de origen más cercano a nosotros al tener la máquina de frente y a la izquierda. Hacemos clic en "Siguiente" y luego en "Finalizar".

Calibración del laser

Ahora que tenemos nuestra grabadora láser configurada en Sculpfun, debemos hacer algunos ajustes en el láser.

Colocamos el material con el que vamos a trabajar debajo del láser. En la parte posterior del módulo láser, se encuentran cuatro tornillos que debemos aflojar con la herramienta incluida en la máquina o con una llave allen. La protección del láser debe bajar y quedar pegada al material de trabajo.

Junto con la máquina láser, encontramos un cilindro de metal que debemos colocar entre el láser y el material, como se muestra en la figura. Una vez que el cilindro está colocado, veremos que la protección del láser queda separada del material por unos milímetros. En este punto, debemos apretar los cuatro tornillos de la parte posterior y retirar el cilindro de metal.

Una vez hecho esto, el láser estará listo para trabajar. Esta distancia es crucial, ya que proporciona la separación óptima para que el láser funcione correctamente, garantizando el punto de enfoque preciso para realizar grabados o cortes.

Prueba de materiales

Cuando trabajamos con un nuevo material, debemos realizar algunas pruebas para entender cómo se comporta nuestra máquina con ese material en específico. Dependiendo del material que utilicemos y del tipo de grabado o corte que queramos realizar, es necesario ajustar la potencia y la velocidad de desplazamiento del láser. Esto nos permitirá obtener cortes o grabados precisos.

La primera prueba que se debe hacer es la Prueba de Materiales, la cual podemos encontrar en el menú "Herramientas Láser". Esta prueba creará una cuadrícula en el material, como se muestra en la figura, donde cada cuadrado se graba con una combinación diferente de potencia y velocidad. Es decir, durante la prueba, el láser irá variando tanto su potencia como su velocidad. Inicialmente, podemos dejar los parámetros predeterminados y, dependiendo de los resultados, ajustar estos valores según nuestras necesidades y la potencia real del láser.

Entre los parámetros que podemos configurar se encuentran la potencia mínima y máxima, así como la velocidad mínima y máxima de desplazamiento. Si tenemos un láser de alta potencia, podemos trabajar con mayores velocidades. Sin embargo, si nuestro láser es de baja potencia, será necesario utilizar velocidades más lentas para lograr el grabado o corte adecuado del material.

En mi caso, el láser de la máquina es de 20 W, por lo que no puedo utilizar velocidades muy altas. Como se observa en la imagen, la velocidad mínima es de 200 mm/min y la máxima es de 10,000 mm/min. Además, se debe tener en cuenta que el material que estoy utilizando es MDF de 3 mm de espesor (un material muy adecuado para trabajar).

En la imagen podemos ver el resultado de la prueba: a una velocidad de 10,000 mm/min y una potencia del 105%, el material no se puede grabar. En general, a velocidades altas y potencias bajas no se percibe ningún grabado en la madera.

Por el contrario, una velocidad baja y una potencia alta logran realizar cortes en la madera. En particular, debemos notar que a una velocidad de 200 mm/min y una potencia del 60%, el corte se realiza correctamente.

También es importante destacar que, con potencias elevadas, el material puede llegar a quemarse sin ser cortado (segunda fila desde abajo). Este es un efecto no deseado, ya que representa un mal acabado en nuestros trabajos.

Prueba de intervalo

La segunda prueba que debemos realizar es la Prueba de intervalos, que se puede encontrar en el menú Herramientas Láser. Esta prueba nos permite variar el número de líneas que se graban sobre una superficie, es decir, ajustar la separación entre las líneas que dibuja el láser al hacer un grabado. Esto es importante porque, dependiendo del material que estemos usando, el resultado puede ser una superficie más lisa o más rugosa al tacto. Aunque en la madera no es tan evidente, en materiales como el metal es de suma importancia, ya que podemos generar diferentes texturas.

La prueba consiste en dibujar varios cuadrados de la misma dimensión, pero con un número diferente de líneas en su interior, es decir, se varía el espaciado entre las líneas dentro de cada cuadrado, lo que da como resultado un número diferente de líneas en una misma superficie.

Podemos ajustar los parámetros de esta prueba, como la velocidad y la potencia. Basándonos en la prueba anterior, debemos buscar una potencia y velocidad adecuadas para que el material sea grabado sin quemarse ni cortarse. Además, podemos variar la separación mínima y máxima entre las líneas que se dibujarán.

Los resultados de la prueba en madera muestran que, aunque la variación en la potencia y velocidad no genera diferencias visuales significativas, la textura al tacto revela una correlación directa entre la separación de las líneas y la rugosidad superficial. En el metal, la rugosidad del grabado es más evidente visualmente, y en la madera, una densidad de líneas excesiva puede provocar carbonización del material.

Puedes ver el video del tutorial en Youtube



Conclusiones

Realizar pruebas de materiales es fundamental para optimizar los parámetros de nuestro láser y obtener resultados de calidad. Estas pruebas nos permiten determinar la potencia y velocidad ideales para cada material, minimizando el desperdicio y asegurando cortes y grabados precisos.

Además, la superficie de trabajo es un factor clave. Una cama de corte nivelada, como un panal de abeja, garantiza una mejor adherencia del material y evita deformaciones. Aunque se pueden utilizar alternativas como madera lisa, es recomendable invertir en una cama de corte profesional para obtener resultados óptimos.

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